WASHINGTON — Aunque Costa Rica tiene una larga historia de inmigración como uno de los principales destinos de América Latina, la llegada de un número significativo de migrantes desde 2015 ha puesto nuevos estreses en el sistema migratorio. Estas llegadas incluyen refugiados y migrantes de Colombia, Cuba, Nicaragua y Venezuela que desean un asentamiento permanente, hasta migrantes estacionales de países vecinos y migrantes extracontinentales que transitan por Costa Rica en ruta hacia destinos más al norte. A medida que la población inmigrante de Costa Rica sigue creciendo, el diseño de políticas que integren eficazmente a los recién llegados es fundamental para aprovechar los beneficios a largo plazo que la inmigración puede ofrecer y reducir las tensiones sociales, destaca un nuevo informe del Migration Policy Institute (MPI).
El informe, Estado de la Política Migratoria e Integración de Inmigrantes de Costa Rica, examina el estado de las instituciones y políticas que apoyan la integración y el acceso de los migrantes a servicios en cuatro áreas clave: regularización y registro, salud, educación y empleo. Utilizando una metodología particular que se basa en entrevistas con actores gubernamentales y no gubernamentales, así como una revisión de la literatura, los autores del informe identifican dónde existen logros y avances en el sistema migratorio y dónde persisten obstáculos y deficiencias.
“La dinámica migratoria en Costa Rica demanda de un enfoque renovado para la integración de los migrantes, uno que abarque las muchas áreas políticas que dan forma a la inclusión de los migrantes y que tome en consideración la diversidad dentro de la población extranjera del país,” escriben los analistas Diego Chaves-González y María Jesús Mora de la Iniciativa de América Latina y el Caribe de MPI.
Entre los cambios necesarios, argumentan los autores, es el ajuste de la ley de migración de Costa Rica de 2009, que se veía como un avance pionero por su introducción del concepto de la integración y las salvaguardas de derechos humanos, pero que ahora se encuentra anticuada debido a la escala y la naturaleza de la migración. Si bien la ley incluye una amplia gama de categorías de migrantes para el registro y la regularización, el gobierno ha enfrentado dificultades para satisfacer las demandas en medio del aumento de la migración.
Los altos costos y los requisitos difíciles de satisfacer de muchas categorías migratorias han creado una situación en la que el sistema de protección internacional de Costa Rica es el único mecanismo de regularización accesible para muchos migrantes. Ampliar las vías de migración legal podría ser crucial para aliviar las presiones sobre el sistema de protección humanitaria y asegurar el primer paso de los migrantes hacia la integración, señala el informe. Además, una mejor coordinación entre las entidades gubernamentales costarricenses y los gobiernos de la región, y entre ellos y el sector privado y las agencias de cooperación internacional, podría ser clave para alinear objetivos y compensar costos.
Entre otros hallazgos:
“Costa Rica debe mantenerse enfocada en los beneficios que la migración puede traer a largo plazo, incluso mientras los servicios públicos trabajan para superar los desafíos inherentes a la llegada repentina de tantas personas,” concluye el informe. " Si se hace bien, las mejoras en la forma en que Costa Rica apoya la integración de los migrantes facilitarán que las instituciones del país equilibren sus obligaciones en competencia y fortalezcan a la sociedad.”
Puede leer el informe aquí: www.migrationpolicy.org/research/politica-migratoria-integracion-costa-rica.
Y en inglés aquí: www.migrationpolicy.org/research/costa-rican-migration-immigrant-integration-policy.